
Brillante en
sus estudios, Wilde consiguió una beca en la Magdalen College de Oxford, donde cosechó
éxitos y premios no solo en sus clases, sino por sus escritos. En 1884, Wilde
contrajo matrimonio con Constance Lloyd, con la que tuvo dos hijos,
Cyril y Vyvyan. A partir de ahí comienza el periodo más fructífero y
creativo de su carrera, publicando numerosas obras dentro del género de los cuentos
como las compilaciones El príncipe feliz
y otros cuentos (1888) y Una casa de
granadas (1892), pero la obra sin duda más recordada de Wilde sería «El retrato de Dorian Gray».
En 1891, Wilde
conoce a Lord Alfred «Bosie» Douglas, el tercer
hijo del Marqués de Queensberry, y pronto inician un romance. Cuatro años
después, el escritor demandó al padre de «Bosie» por divulgación ya que le
había acusado de homosexualidad. Wilde retiró el caso, pero fue arrestado y
declarado culpable de indecencia grave y condenado a prisión. Wilde sigue escribiendo durante su
encierro. De esta época surge
De Profundis, una
larga carta dirigida a su amante. Tras su liberación escribe Balada
de la cárcel de Reading, poema sobre la relación entre el amor y las convenciones
sociales.
A partir de
ahí, Wilde se dedica a vagar por Europa sin poder recuperar la creatividad que
le había encumbrado pocos años antes. Solo y enfermo de meningitis, Oscar
Wilde fallece el 30 de noviembre de 1900 en París, donde descansan sus restos en
una tumba que se ha convertido en lugar de peregrinación
mundial.
Moisés
Fernández